Tal como estaba programada, la tarde del pasado lunes se inició la audiencia de formalización de José Navarro, el presunto secuestrador de la pequeña Emmelyn de 11 años en Licantén, región del Maule.

En este contexto, la abuela paterna de la menor, María Teresa Vergara, reveló importantes detalles de la vida de su nieta y el mundo en el que se desarrollaba.

“Cuando la otra vez se quebró (las piernas), estuvo en rehabilitación en Curicó. Cuando el abuelo (materno) le tiró unos palos encima. Cuarao’ habría estado por ahí y le quebró las dos piernecitas”, comenzó relatando la mujer ante las cámaras del matinal Muy Buenos Días.

“La niña tiene las marcas en las piernecitas… Cuando la trajimos ya estaba accidentada y la llevamos a un hospital, la operaron en Curicó y allá la tuvo mi hijo. ¡Fue un accidente! La niña quedó mucho tiempo en silla de ruedas”, especificó.

Según la mujer, la familia de su nuera vivía en un mundo vinculado al alcohol. “Desde la bisabuela para abajo se curaban. Toda la gente por ahí sabe. A mi niña los vecinos me contaban que la mandaban a comprar vino en la noche, sola por esos callejones”, relató la mujer.

Finalmente, María Teresa se negó tajantemente a que Emmelyn vuelva a la casa de su madre. “No, porque yo siempre vivía con una angustia de que algo le iba a pasar a mi niña, por el comportamiento de la mamá. El hecho de cambiar de muchas parejas, a mí me tenía muy preocupada… cualquiera le podría hacer algo”, concluyó.