La combinación entre papas fritas y salchichas es una delicia para el paladar de muchos. Tanto así, que algunos literalmente matarían por uno de estos platillos.

Es el caso de Rodrigo Villasante Tacoma, un hombre que no soportó que otro cliente comprara las últimas dos porciones que quedaban en un carrito de la Plaza de Santiago.

Según consignó La República, el hecho ocurrió el 23 de diciembre en el Cusco, lugar donde Rodrigo Villasante dio muerte a Moisés Yupanqui Calsín, estudiante de turismo de 19 años.

Al respecto, la madre de la víctima aseguró que: “El asesino le pidió a la vendedora de salchipapas un plato, pero ella le dijo que ya no había y que los dos últimos platos eran para mi hijo, eso le molestó a ese hombre que se fue a su casa, sacó un cuchillo y atacó a mi hijo”.

Villasante decidió entregarse a la Policía Nacional del Perú tras permanecer varios días en clandestinidad, quienes lo trasladaron a la División de Investigación Criminal (Divincri) para esclarecer el hecho.

Actualmente, la familia espera que se haga justicia y el crimen no quede impune.