Un macabro e impactante crimen quedó al descubierto en Indiana, Estados Unidos, luego que Kelly M. Cochran de 34 años, recibiera una segunda cadena perpetua por el asesinato de su esposo.

La mujer condenada a 65 años de cárcel, le inyectó una alta dosis de heroína a Jason Cochran, quien al no poder reaccionar, lo asfixió con una almohada, tal y como consiga el sitio de noticias FOX5DC.

Cabe destacar que Kelly ya cumplía condena por matar y descuartizar a otro hombre. Se trataba de Chris Regan su examante, desaparecido en 2014. Se cree que la mujer “guardó” partes del cuerpo de su víctima, los cocinó en una parrilla y posteriormente se los dio de comer a sus vecinos.

Kelly y su esposo asesinaron a este hombre luego de prometer que eliminarían a “cualquier persona que se involucrara en sus relaciones extramaritales”.

Al pasar el tiempo, la mujer habría comenzado a extrañar a su amante asesinado, por lo que se enojó con su esposo y en venganza lo mató inyectándole drogas.

De acuerdo a la investigación, Kelly pudo haber matado a nueve personas y enterrado sus cuerpos en todo el medio oeste de Estados Unidos.