Alena Styukhina tenía 15 años cuando conoció a Artyom Dorogov, un joven de 22 años, con quien entró en contacto mientras visitaba a unos familiares en la ciudad de Zemetchino, ubicada al suroeste de la provincia de Penza, en Rusia.
La adolescente se reunió con Dorogov y juntos fueron hasta un garage cerrado donde él guardaba su automóvil, y luego de un rato conversando habrían decidido tener relaciones sexuales, según consignó el medio inglés The Sun.
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Debido a las bajas temperaturas de esa zona, Artyom decidió encender el vehículo para mantener la calefacción encendida, y ese fue su gran error, ya que los gases tóxicos terminaron matando a Alena, quien se intoxicó debido a que el monóxido de carbono no tenía por dónde escapar.
De acuerdo a las declaraciones de Dorogov, quien ahora está acusado de homicidio involuntario y de tener sexo con una menor de edad, ambos se sintieron mal cuando el gas tóxico se esparció por todo el garage cerrado, sin embargo, cuando intentaron escapar él se desmayó y luego, cuando recobró la conciencia, fue a ver a Alena, quien yacía inconsciente.
Rápidamente fue a avisar a sus familiares, para contarles lo que había sucedido y contactó a paramédicos, lamentablemente cuando éstos llegaron ya era demasiado tarde y la adolescente estaba muerta.
Un vocero de la policía indicó: “Sabiendo que la víctima era menor de 16 años, el sospechoso tuvo una relación sexual con ella en el auto. El motor de éste estaba funcionando para mantenerlos temperados y las puertas del garaje también estaban cerradas, por lo que ambos se intoxicaron“.
Por último, la autopsia determinó que la niña murió por envenenamiento con monóxido de carbono.
