Un horrible crimen quedó al descubierto hace algunos días en la localidad bonaerense de San Isidro, luego que un anciano de 80 años confesara haber matado a su pareja de 75 años con veinte puñaladas.

De acuerdo a fuentes policiales consignadas por el medio local El Intransigente, el sujeto aseguró que mató a su mujer porque lo tenía “cansado”.

Fueron los vecinos quienes llamaron a la policía luego que escucharan gritos y ruidos desde la casa que compartía el matrimonio. Tras las constantes denuncias, efectivos policiales llegaron hasta la casa de Gabriela Josefina Del Olmo (75) y Eduardo Cid (80), y al abrirles la puerta, este último les habría confesado: “La maté porque me tenía cansado“.

La mujer yacía muerta y semidesnuda a un costado de la cama de su dormitorio. Hasta la escena del crimen llegó el fiscal encargado del caso, Claudio Scapolán, y los peritos correspondientes, quienes enviaron el cuerpo para su autopsia y así determinar la causa exacta de su muerte, aunque a juzgar por las heridas, se habría utilizado un arma blanca.

La víctima tenía dos heridas punzo cortantes en la sien izquierda y al menos otras 17 lesiones de arma blanca en la espalda y algunas lesiones defensivas. En el lugar también había un cuchillo y un fierro ensangrentado.

El anciano fue acusado de femicidio, y paralelo a la investigación, Scapolán ordenó estudios y exámenes psiquiátricos y psicológicos para el imputado.