El actual campeón del mundo en el lanzamiento del martillo en Beijing, el atleta polaco Pawel Fajdek, pasó el susto de su vida tras una desmesurada celebración luego de obtener el oro. En su borrachera pagó con la presea dorada a un taxista que lo llevó hasta su hotel.

Pawed bebió de más en la fiesta de celebración por su victoria organizada en un restaurante de la ciudad china el pasado domingo. Cuando decidió volver al hotel, ante la falta de dinero el atleta no encontró mejor forma para pagar el taxi que utilizar su recién obtenida medalla de oro.

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Al despertar, el polaco se comunicó con la policía china y les dijo que el valioso objeto “se había perdido”. Una vez encontrado, el conductor insistía en que Pawed le había pagado con ella, según la información recogida por Huffingtin Post.

Cabe precisar que el europeo ganó la medalla el domingo al lanzar el martillo a una distancia de 80,88 metros, superando las marcas de sus compatriotas Dishod Nazarov y Wojciech Nowicki, quienes lograron la plata y el bronce respectivamente.