Otra performance para el olvido se vivió en el mundial de la especialidad celebrado en la ciudad rusa de Kazán.
Se trata del cometido del clavadista venezolano Robert Páez, quien para su desgracia tuvo la peor puntuación posible en esta disciplina: cero puntos, de acuerdo a lo informado por diario El Comercio de Perú.
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Con una dificultad de 3.5, el sudamericano ya se veía titubeante sobre el trampolín. De hecho, en su primer acercamiento al precipicio debió volver para preparar nuevamente el salto.
Con mejor disposición en su segundo intento el moreno saltó, pero un movimiento en falso lo alejó de la tabla cayendo de manera horrible y sin poder preparar una entrada decente al agua.
