A un día del duelo por el título de Copa América, los jugadores de ambas selecciones ya están mentalizados en lo que será uno de los partidos más importantes de sus carreras.

28 años han pasado desde que La Roja disputó su última final copera y la esperanza por conseguir el triunfo está latente en cada centímetro del país, claro que la tarea no será fácil considerando la calidad del rival, que en su extenso historial acumula 14 títulos continentales.

La idiosincrasia del fútbol juega un papel importante en todo esto, y es que en la antesala del juego los hinchas y jugadores más apasionados apagan incendios con bencinas y se enfrascan en un suerte de declaraciones cruzadas.

Uno de los que está motivado e hiperventilado con el partido de este sábado es el defensor trasandino Marco Rojo, quien a diferencia de su colega Javier Mascherano, que calmó las aguas con palabras sensatas y responsables, el hombre de Manchester United aleonó a la marea roja.

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“Una final se juega con huevos. Después de perder el Mundial, se siente hambre de revancha”, manifestó agregando que le agrada el hecho que “que nos putee toda la cancha”, dando a entender que el fastidio chileno alimenta su sed de triunfo, de acuerdo a lo acotado por el portal de noticias BioBioChile.

“Por lo que vi, la gente mucho no nos quiere. Más que nada lo sentí al llegar a Santiago. Como que cambió todo ahora. Antes estaba todo bien y ahora que jugamos con ellos… Igual, mejor. Me gusta… A mí me agranda que nos putee toda la cancha. Y a los otros muchachos también les pasará lo mismo. No creo que a Mascherano le asuste que le tiren una piedra…”, detalló el zaguero.

Sobre la final en sí, Rojo agregó que será un partido complicado ante un rival que siempre va al ataque.

“A Chile le gusta atacar, llegar con mucha gente. Por ahí se descuida un poco en defensa. Pero creo que esta vez van a ser más precavidos. Va a ser un partido picante, aunque estamos preparados para cualquier tipo de partido. Ellos van a querer que nos pese ser visitante, pero adentro de la cancha somos 11 contra 11”, finalizó.