Hace dos años, cuando Claudio Borghi dirigía el andar de la selección en las clasificatorias rumbo al Mundial Brasil 2014, se dio un particular incidente en el duelo entre Venezuela y Chile, que terminó con el DT imposibilitado de volver a la banca por largo tiempo.

Corría junio de 2012 y La Roja derrotó a la ‘vinotinto, sin embargo el encuentro no estuvo exento de complicaciones y polémicas. Un altercado entre la banca y cuerpo técnico de la selección, terminó con el ‘Bichi’ suspendido por cuatro partidos oficiales, por insultos racistas sobre el cuarto árbitro, Imer Machado.

El DT trasandino apelando a la justicia, juró que no había sido el autor de tal falta de respeto, sin embargo, su versión no fue escuchada y tuvo que asumir el duro castigo, que marcó el principio del fin de su era en el equipo de todos.

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Hoy, dos años después del incidente, el verdadero autor de los insultos, Miguel Pinto -actual arquero del Correcaminos mexicano- sacó la voz, y en conversación con diario El Mercurio, confesó que él tuvo la culpa por la sanción al ‘Bichi’.

“Cuando uno está en la banca se calienta: que tire la primera piedra quien no lo haya hecho. Tampoco es con el afán de ofender a alguien (…) Sí, me escucharon a mí, los cinco o seis que estábamos ahí y no quiero ser sapo (…) No tengo ningún problema en decirlo, lo hice ahí. En ese momento estaba tan sensible el hecho de decir un color”, señaló el meta que en aquel entonces era alternativa en el combinado nacional.

Ha pasado mucho tiempo desde esa mancha gris en nuestro historial deportivo, sin embargo, Pinto se excusa señalando que nadie le pidió que diera la cara por su DT. “Cometí alguna equivocación, y en este caso la asumió Claudio (Borghi), a quien le tocó un castigo bastante feo. Pero si en esos días él esperaba que yo reaccionara de alguna u otra forma hacia la prensa o a los más cercanos, le pido disculpa si no lo hice. Porque al parecer no vi que a mí me pidieran dar explicaciones”.

De igual forma, reconoce que Borghi fue bastante derecho y leal al no delatar a nadie tras el embrollo. “Claudio fue bastante derecho con los jugadores. Asumió el castigo, nunca echó al agua a nadie. Internamente todos sabíamos lo que había pasado. Dentro de la selección hay muchas cosas que no se van a saber. Y en ese caso él se la bancó por mí y se lo agradezco”, acotó Pinto.

Finalmente, sobre el calibre de los insultos, el ataja pelotas apeló al olvido y aseguró que no recuerda cuáles fueron sus palabras en esos instantes de descontrol. “No me acuerdo específicamente, lo que sí no me puedo desmarcar de lo que dije, eso sería de mentiroso. Debo haber estado gritando todo el segundo tiempo, porque los venezolanos también nos gritaron cosas y uno responde. Lo que pasó es que me debe haber escuchado el cuarto árbitro y la agarró con Claudio”, cerró el arquero ex Universidad de Chile.