La tarde de este viernes, se conoció la declaración de Boris Medina Cifuentes, suboficial del Ejército, cuyo vehículo estaba en manos de uno de los sospechosos del asesinato del carabinero Daniel Palma.

La confesión de Medina se realizó la noche del 5 de abril, poco después del incidente, ante personal del OS-9 de Carabineros. En ella dio detalles de cómo su vehículo, un Chevrolet Sonic azul, terminó en manos de Carlos Cortez Flores, alias “Carlitos Nike”.

En el detalle, publicado por La Tercera, Medina explica que el automóvil fue arrendado en 2022 para ser utilizado como taxi de aplicación.

“En el mes de marzo de 2022, no recuerdo el día exacto le entregué a cargo mi vehículo marca Chevrolet Modelo Sonic, a un conocido que mantengo en la ciudad de Concepción de nombre Bladimir Alexis Díaz Pardo (…) con el fin de que este lo trabajara, quedando de acuerdo que el pago por el auto sería de forma semanal de $ 85.000″, declaró.

Militar entregó su versión sobre vehículo utilizado en caso de suboficial Daniel Palma

Durante ese año, la relación de Medina y Díaz Pardo siguió sin novedades. Eso hasta enero de este año, cuando le entregó a Bladimir Díaz otro vehículo para que también lo pusiera a trabajar como Uber.

Pocos días después comenzaron los inconvenientes, cuando Bladimir le pasó el Chevrolet azul a un hombre de nacionalidad venezolana para que lo trabajara. “Este sujeto le pagaba a Bladimir y este me pagaba a mí, siendo algo así como subarriendo del auto. Hasta el 12 de marzo me pagaron sin ningún tipo de complicación, luego de ello, el 20 de marzo, Bladimir me avisó que este venezolano quería comenzar a pagar de forma mensual”, recordó el suboficial de Ejército Boris Medina.

Si bien había cambios en el trato, el negocio seguía funcionando, por lo que no hubo reparos por parte del militar. Esto hasta inicios de abril, cuando recibió un mensaje por Facebook en el que le comentaban que su vehículo, el Chevrolet Sonic azul, estaba abandonado en la Región Metropolitana.

Pidió a Bladimir Díaz explicaciones, y que ubicara a Carlos Cortez, lo que no fue posible. El propio Medina se comunicó vía WhatsApp con ‘Carlitos Nike’ y le exige que le entregue el vehículo. Eso fue el 2 de abril, tres días antes del asesinato del cabo —ascendido de manera póstuma a suboficial de Carabineros— Daniel Palma.

“Hablé con Carlos y luego llamé al Bladimir para decirle que quería recuperar el auto (…) No me interesaba el pago del auto, quería recuperarlo lo antes posible, quedando de acuerdo que este fin de Semana Santa me entregarían el auto en la ciudad de Concepción”, recordó Medina.

Lo cierto es que no recuperó el automóvil y ahora se busca incansablemente a la última persona que se sabe manejó el vehículo, Carlos Cortez, alias “Carlitos Nike”, uno de los sospechosos del crimen del tercer mártir de Carabineros en menos de un mes.