Fueron tres días los que León, de 7 años, no asistió a la escuela. Los docentes se empezaron a preocupar y dieron aviso a la policía. Así descubrieron lo peor.

El pequeño fue asesinado junto a su madre en la casa que compartían, en la localidad bonaerense de Florida, Argentina. El papá del nene fue encontrado sin vida en la bañera de la propiedad.

Los primeros indicios apuntan a que se trató de un doble asesinato, seguido de suicidio.

María Daniela Carco, de 45 años, y su hijo presentaban, a simple vista, golpes en diferentes partes del cuerpo, según detallaron fuentes policiales.

Aunque aún resta conocer el resultado del análisis de autopsia que determinará las causas de la muerte de ambos.

En la bañera de la casa, los efectivos policiales encontraron a Gabriel Cáceres (45) “con signos de aparente envenenamiento”, detallaron las fuentes.

Según los análisis preliminares de la escena del crimen se presume que el hombre asesinó a su esposa y su hijo, y luego se quitó la vida.

Fue la directora del colegio Cuarto Creciente de la localidad de Florida la que alertó a la policía, porque León hace tres días que no asistía a la institución.

Por eso personal de la policía bonaerense se acercaron a la casa del menor junto a un cerrajero que abrió la puerta, porque desde su interior nadie respondía.

Daniela era oriunda de Bariloche y licenciada en Comunicación Social y profesora de educación especial. Se había casado con Cáceres en agosto de 2015, pero estaban juntos hacía más de veinte años, según contaron en sus redes sociales.

Mientras que su pareja tenía una empresa dedicada a la “ingeniería en Redes Tecnológicas, Estructuras de Datos, Telefónicas y Eléctricas”, según su perfil de LinkedIn.

Los femicidios en lo que va de 2022

En los primeros seis meses del año, se produjeron 146 femicidios en Argentina, según datos de La Casa del Encuentro.

Y se contabilizaron nueve femicidios vinculados de varones. León sería el décimo, de confirmarse la principal línea de investigación hasta el momento.

Los femicidios vinculados se consideran cuando una persona es asesinada para producirle mayor dolor a la mujer que se la quiere lastimar o castigar psíquicamente, como matándole un hijo y dejándola a ella con vida.

Pero también ingresan en esta definición los que resultan muertos por quedar en medio de “la línea de fuego”, como habría sido en este caso con el pequeño de 7 años.