A través de redes sociales, Rodrigo Saavedra denunció que el celular de su hija se incendió en plena clase, en el colegio San Juan Evangelista ubicado en Santiago.

De acuerdo a lo expresado este martes en su cuenta de Twitter, se trata de un teléfono marca Xiaomi, modelo Redmi 9A de 32 GB.

“Estando en su colegio, San Juan Evangelista, y dentro de su sala de clases, con más de 20 testigos, sufrió la explosión espontánea de su teléfono celular”, escribió.

“Milagrosamente, no tenemos que lamentar ninguna de las gravísimas consecuencias posibles tras esta falla inexplicable, solo pequeñas quemaduras de ella y una compañera de curso. Sin embargo, tuvimos que retirarla del colegio por el fuerte shock que sufrió”, agregó.

El hombre continuó: “Como papá considero que esta situación es gravísima. Compramos un teléfono para dar seguridad y conectividad a nuestra hija, jamás pensamos que estábamos comprando un elemento explosivo que la expuso a sufrir quemaduras y lesiones de carácter muy grave”.

Mientras que en conversación con BioBioChile, Saavedra explicó en detalle lo ocurrido. “Ella estaba en clases, terminó un trabajo que estaba haciendo con su grupo y le pidieron permiso al profesor para estar con el celular, porque ya estaban desocupadas. Entonces estaba jugando con sus amigas y, según me cuenta, el teléfono saltó”.

“En realidad no saltó, lo que pasó fue que subió de temperatura normal a altísima, porque lo tenía en la mano. Entonces (el teléfono) ya en el aire empezó a lanzar como un fuego artificial, chisporrotear, emitir llama, cae al suelo y este se quema en la sala. Luego de eso generó una nube de humo”, complementó.

Según su relato, la clase fue suspendida. “La combustión de una batería de litio es muy tóxica. El profesor evacuó a los niños, porque sabía lo que estaba pasando”, sostuvo.

Cabe señalar que desde Xiaomi y París, centro comercial donde adquirió el producto, se contactaron con él para conocer los detalles del caso. Hasta ahora existe una investigación en curso.