En toda una polémica terminó la visita de la concejala pór Ñuñoa, Daniela Bonvallet, a un restorán de dicha comuna: la hija del fallecido comentarista deportivo insultó y amenazó a los trabajadores del lugar.
A Bonvallet se le llamó la atención por fumar al interior del local y se le solicitó que apagara el cigarro, algo que no le habría gustado.
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Pero hubo otro hecho que indignó a la hija del exseleccionado nacional: que le dijeran que “no estaba en condiciones de seguir pidiendo alcohol”, algo que acusa en el registro que grabaron testigos del hecho.
Ante esta situación, la edil no reaccionó de la mejor forma, profiriendo las siguientes palabras. “Eres un simple miserable muerto de hambre, eres un hombre insignificante, ganas un sueldo miserable de garzón”, palabras que figuran en el informe de la Dirección de Seguridad Pública de Ñuñoa.
Asimismo, amenazó con quitar la patente al local, en su rol de concejala de Ñuñoa.
Habló el dueño del local
Ahora fue el dueño del restorán, Rómulo Chávez contó detalles del polémico episodio: “Mi instrucción fue que llamaran a Carabineros. Cuando uno se pasa de copete no se puede dar más trago”, enfatizó.
“Nosotros venimos trabajando ya más de 10 años en este rubro y sabemos qué cantidad se toma un cliente y cuando ya toma esa cantidad no se puede dar más”, explicó en en el matinal Mucho Gusto.
Asimismo, manifestó que “primero fue el tema del cigarro, porque en lugares públicos y cerrados no se puede fumar y la señora como se puso agresiva, nosotros no le podíamos vender más alcohol, porque si nosotros seguíamos vendiéndole alcohol se iba a poner más agresiva”.
“Siempre hemos tratado de salir adelante, sobre todo con el tema de discriminación, yo sé que todo el personal quedó indignado”, añadió a su testimonio.
Por último, Chávez confirmó que Bonvallet se contactó con ellos para ofrecer disculpas. “Todos podemos tener malos momentos, pero no llegar a ese extremo. Todos merecemos respeto”, cerró.
