La noche del 2 marzo del 2012 Daniel Zamudio, de 24 años, se encontraba en el Parque San Borja de Santiago Centro tras compartir con unos amigos.

Este tranquilo panorama se tornó inesperadamente en una pesadilla para el joven. Cuatro sujetos lo abordaron, lo golpearon y torturaron por horas.

Los responsables del ataque fueron Alejandro Angulo, Patricio Ahumada, Raúl López y Fabián Mora. Tras realizar el violento actuar, los cuatro abandonaron a Daniel en el lugar.

Según consignó El Mostrador, no fue hasta las 04:00 horas que un guardia del parque lo encontró y alertó a las autoridades.

En ese momento, Zamudio estaba inconsciente y en estado de gravedad. Tenía fracturas en su pierna, quemaduras de cigarro en su rostro, parte de su oreja cercenada y marcas de esvásticas en el cuerpo.

De acuerdo a 24 Horas, Angulo, Ahumada, López y Mora utilizaron una piedra de 6 kilos para golpear a Daniel. Además, le gritaron consignas como “lacra, maricón, ensucias mi patria”.

Una vez que llegó ayuda al lugar, Zamudio fue llevado a la Posta Central y, debido a la gravedad de sus heridas, fue puesto en coma inducido.

Pese a los esfuerzos médicos, el 27 de marzo, tras más de tres semanas batallando por su vida, Daniel falleció.

Ley Zamudio y condenas de los imputados

La Ley Antidiscriminación comenzó su tramitación en 2005, pero fue recién en julio de 2012 cuando se logró su aprobación.

El crimen de odio de Daniel llevó a agilizar el proceso y la sociedad también presionó al Congreso para que fue despachada. Hoy, la norma se conoce como “Ley Zamudio”.

Respecto a los autores de este macabro homicidio, estos recibieron distintas condenas.

Patricio Ahumada, señalado como el principal responsable del ataque, fue sentenciado a cadena perpetua.

Alejandro Angulo y Raúl López, en tanto, fueron condenados a 15 años de presidio. Fabián Mora, por su parte, lo sentenciaron a siete años. Eso sí, en 2016 accedió a libertad condicional.

De hecho, en 2020 Mora concedió una entrevista al programa Mírame de TVN, donde entregó polémicas declaraciones.

“No me trae pena estar aquí (Parque San Borja), como si tuviera un culpa o algo, no lo siento en verdad. Se me condenó por homicidio calificado, pero no maté a nadie. Ellos se mandaron la cagada, ellos lo mataron”, afirmó.