Exigiendo justicia salió Laura Delgadillo del Instituto del Quemado en Argentina, quien junto a su hijo fueron víctimas del ataque de la expareja de su novio.
El hecho ocurrió en septiembre pasado en el país trasandino, cuando la mujer llegó presuntamente motivada por los celos hasta el domicilio de esta madre, donde le roció líquido acelerante para posteriormente prenderle fuego a ella y su pequeño de tan solo un año y medio, Liam.
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Lo anterior, ocurrió luego de que la autora del crimen, Liz Magnolia Ortega Castillo golpeara a Laura en su nariz, lo que hizo que soltara a su bebé que llevaba en brazos, segundos que ella aprovechó para rociarle un bidón de bencina al menor de edad.
“Ahí sentí el ardor, pero no pensé que también el nene estaba prendido fuego”, recordó Laura según informó el medio argentino Todo Noticias, donde además precisó: “Me apagué con un charco de agua, con el que me refregué. En eso me di un golpe contra el cordón en la zona del pulmón”.
Lamentablemente, el pequeño no logró sobreponerse a la gravedad de las quemaduras, perdiendo la vida días más tarde, mientras Laura seguía en recuperación en el centro asistencial.
De hecho, la joven madre de 22 años debió permanecer internada casi tres meses, enterándose del fallecimiento de su pequeño cuando despertó del coma inducido, provocándole una profunda depresión por la que incluso pasó días sin comer.
Sin embargo, a fines de noviembre Delgadillo fue dada de alta en medio de gritos de justicia, asegurando que la mujer que la atacó habría actuado como cómplice de quien fuese su pareja, Agustín Sayago.
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Giro en el caso
En ese sentido, según comentó la víctima al citado medio, hoy toma fuerzas para exigir que se condenen los delitos hacia ella y Liam, aunque aún le espera una larga recuperación.
“Creo que sobreviví para pedir justicia por mi hijo. Es lo único que me da fuerzas y me hace estar en pie. Es desgarrador volver a casa y ya no tenerlo”, aseguró.
Asimismo, dijo que tiene sospechas de que Sayago habría actuado como cómplice de Ortega, ya que estaría al tanto de las amenazas, y que incluso presenció el actuar de la mujer sin intervenir al tomar su moto e irse del lugar.
En tanto, Laura Delgadillo enfatizó que quien fuese su pareja la abandonó por completo, porque tampoco la trasladó a un centro de urgencias, sino que lo hizo un vecino del sector al verla envuelta a ella y su hijo en llamas.
“Tengo la necesidad de que pague por lo que hizo. Es lo que me da fuerzas para seguir, además de mis nenas. Pero que haya justicia por mi bebé, porque esto fue todo planeado. No era necesario matar a mi hijo. Es imperdonable lo que hicieron”, expresó.
Familia no cree el nivel de violencia
Dicha situación, se suma a que Ortega habría expresado su ira contra la joven madre pese a que se conocían de la infancia, y aún se desconoce por qué actuó con tal nivel de violencia.
“No podemos creerlo porque a ella la conocemos de toda la vida. Las dos iban juntas al colegio y se querían mucho. De hecho, Liz llegó a vivir en la casa que compartían Laura y Agustín, pero se ve que algo pasó en el medio, algo de lo que nosotros no estábamos enterados”, contó la madre de la víctima, Vanesa González.
En la misma línea, la progenitora de Laura insistió en que la expareja de su hija está involucrada en la muerte del bebé. “Para mí él la entregó, estaban todos de acuerdo para que ocurriera el ataque”, dijo González, quien permanece a cargo de las otras dos hijas de la víctima, que tienen 6 y 4 años.
Cabe mencionar, que actualmente Liz Ortega y Agustín Sayago están imputados por homicidio agravado por alevosía, además del intento de asesinato contra Laura.
Eso sí, la investigación sigue en curso y ambos se negaron a declarar sobre lo ocurrido, mientras que el caso quedó a cargo de la Unidad Fiscal para Investigación especializada en Homicidios.
