La senadora Jacqueline van Rysselberghe, se refirió este viernes a la polémica por su viaje a Arabia Saudita los primeros días de junio.

Sobre ello conversó con Radio Bío Bío Concepción, donde acusó que la ola de críticas fueron artificiales y malintencionadas, aseverando que su traslado fue de carácter político.

Lo anterior, pues señaló que en 2019 fue invitada por el embajador del reino, cuyo viaje debió postergar por el estallido social y posteriormente por la pandemia de COVID-19.

“Me parece absolutamente artificial y malintencionada, porque la verdad cuando además al mismo tiempo están afuera de Chile varios otros parlamentarios, como el senador Navarro o el senador Insulza, y de ellos no dijeron absolutamente nada, me parece que todas las críticas eran odiosas y malintencionadas”, dijo.

Sobre el objetivo de la convocatoria, Van Rysselberghe sostuvo que solo permaneció 72 horas en el país de medio oriente motivada por la Embajada en Santiago de Arabia Saudita, para establecer un contacto con la nación.

“China tampoco es una democracia, sin embargo, tenemos relaciones comerciales con China. Entonces, a mí me parece que si Arabia Saudita quiere poder establecer relaciones comerciales con nuestro país (…) Para nuestra zona, nuestros agricultores, es un mercado súper atractivo, y (así) no tener que depender 100% de los chinos”, señaló.

Finalmente, la senadora insistió en que todo el traslado lo pagó el estado del país que visitó, sin ningún cargo ni al Senado ni al partido, y que al regreso realizó la cuarentena en su casa, como lo permite una norma para parlamentarios.