Conmoción ha causado el caso de la desaparición de Anna (1) y Olivia (6) en España, las pequeñas a las que se les perdió el rastro el pasado 27 de abril junto a su padre, Tomás Antonio, luego de que zarpara desde el puerto de Santa Cruz de Tenerife en una lancha de su propiedad.

Sin embargo, este jueves se dio a conocer el lamentable hallazgo del cuerpo sin vida de la hermana mayor, el cual estaba a mil metros de profundidad junto al ancla del barco de su progenitor.

Eso sí, el caso tendría nuevos antecedentes, pues tras encontrar los restos de la menor de edad, la Guardia Civil española baraja la teoría que una vez que el padre secuestró a ambas pequeñas las habría drogado.

Lo anterior, pues en ningún lugar se hallaron restos de sangre de ellas en su domicilio, en la lancha o el vehículo en el que se trasladaron, pero sí se encontraron varias cajas de medicamentos.

De acuerdo al medio Crónica, dentro de los fármacos habría calmantes y relajantes musculares, cuyos envases estarían prácticamente vacíos por lo que se presume que sería una gran cantidad la ingesta que habrían recibido las pequeñas.

Ante todos los antecedentes, será clave la autopsia que se le practicará al cuerpo de Olivia, donde se determinará si fue o no drogada, además de las pericias a una bolsa que fue hallada junto a sus restos, que se presume podría contener el cuerpo de su hermana pequeña.

Eso sí, la búsqueda de Anna y su padre no ha cesado, ya que recordemos que es el presunto asesino de sus hijas.