El representante del Colegio Médico de Valparaíso, Luis Ignacio de la Torre, participó de Contigo en la mañana este jueves, donde lanzó un diagnóstico de la situación actual de Chile, y desató una ola de comentarios en redes sociales.

Y es que el doctor no tan solo se refirió a la pandemia que afecta la país, sino que también a las desigualdades que sufre la población.

“Las organizaciones humanas más exitosas de laS historias se han construido en base a la confianza, y desgraciadamente la confianza es menor en las sociedades que son más desiguales”, partió diciendo De la Torre.

“Nosotros tenemos en esta diferencia abismante, que hizo que un ministro de salud reconociera, con choque de realidad que en Chile había pobreza o que los políticos reconozcan las condiciones vida de un porcentaje de la población son menores a lo que los promedios nos indican”, agregó molesto.

En este sentido, el representante del Colmed aseguró que en el país se ‘vende la pomada al extranjero’ al hablar del PIB o del exitoso modelo de vacunación.

“Hay personas que se levantan a las 05:30 de la mañana, que caminan 10 o 15 kilómetros para tomar una movilización, a dos horas de Viña del Mar, para llegar al hospital a las 07:30 y para que los atendamos tres horas después. Terminan y se tienen que devolver, y lo que gastan en movilización de su sueldo, es altísimo”, detalló el médico.

Por su parte, aprovechó de criticar a quienes legislan en el Congreso, a que su juicio, viven una realidad aparte a la de población criolla.

“Quienes firman las leyes votan en un lugar cerrado y no conocen a la gente, en un lugar que está privilegiado. ¿Cuántos chilenos le pueden pagar a una asesor para que nos ayuden a entender la tarea? Con auto, combustible, con celular, con viáticos”, lanzó molesto.

La reflexión de Luis Ignacio de la Torre cerró con un potente mensaje: “Empieza la pillería el vivo y que termina minando la confianza en las instituciones que se supone que están para cuidar a los más desprotegidos . Eso es lo que de alguna manera tiene que cambiar. Si nos dedicamos al ser humano, sobre todo al que sufre y al que está viviendo una situación más compleja, y los ponemos al centro, probablemente no tendríamos las tasas que tenemos hoy en día, porque nos centramos en el ‘winner’, en el que se salta la fila”.