Este martes, se dio conocer la existencia de una caseta con cámaras de seguridad, instalada a unos 700 metros de la casa de Tomás Bravo, niño de tres años que desapareció el pasado miércoles. Sin embargo, posteriormente la estructura fue retirada del lugar.

En este contexto, Elisa Martínez, abuela materna del menor extraviado, se refirió al antecedente. “La sacaron, desapareció. Ahí tenían cámaras”, señaló en conversación con el matinal Contigo en la mañana de Chilevisión.

“No sé si en Investigaciones vieron esas cámaras, pero desapareció hace como dos días (…) No estoy muy segura si ellos (policías) sabían”, añadió Martínez.

Asimismo, Omar Escobar, familiar de Tomás, precisó que el viernes (19 de febrero) alguien retiró los dispositivos de seguridad. “Quiero que investiguen qué podría haber en las cámaras”, señaló en conversación con el programa Hola Chile de La Red.

De igual forma, describió que en ese sitio había guardias de seguridad e incluso un baño químico que corresponderían a la forestal Arauco.

Captura La Red
Captura La Red

¿Qué pasó con esas cámaras?

No obstante, según explicó Christian Garrido, ex PDI y perito criminalístico en el programa de La Red, las cámaras fueron sacadas del lugar, debido a que cambiaron a la empresa que prestaba el servicio.

“Ya estaban comprometidas para ser retiradas con anterioridad a la desaparición de Tomás. Pero tengo entendido que las imágenes y grabaciones ya fueron solicitadas por la Fiscalía“, detalló finalmente.