Durante este lunes se votó en la Sala de la Cámara de Diputadas y Diputados, el proyecto de ley que busca endurecer el expendio, comercialización y promoción de bebidas alcohólicas.

El proyecto de ley que permanecía hace 14 años ‘dormido’ en el Congreso, comenzó a avanzar este 21 de diciembre, donde se concentra una de las normativas que prohibe la venta en “estaciones de servicio o bombas de bencina, salvo que en ellas existieran establecimientos o restaurantes que cuenten con patente que permita su venta”.

Al mismo tiempo, el artículo primero exige el etiquetado de todas las bebidas alcohólica de graduación, igual o mayor a un grado y que sea comercializada en nuestro país, una situación que generó controversia entre las carteras de Salud y Agricultura.

A su vez, hubo consenso en cambiar la frase al menos cada dos años, donde se explica que el excesivo consumo de estas bebidas puede generar problemas, las cuales corresponden a: “La mujer embarazada no debe beber alcohol”, “El consumo de alcohol limita su capacidad para conducir” y “El consumo de alcohol en menores daña su desarrollo físico e intelectual”.

De esta forma, y con todos los cambios, el proyecto pasó a comisión mixta, momento donde deberán definir las diferencias entre el Senado y la Cámara de Diputadas y Diputados en el proyecto de ley.

¿Qué se rechazó?

En tanto, una de las medidas que se rechazó es incluir en los envases algún impreso o advertencia gráfica que muestre un auto, una mujer embarazada o un número 18 rodeados cada uno por una circunferencia.