La Organización Mundial de la Salud advirtió que las vacunas no son una solución mágica para la crisis de COVID-19, en momentos en que Rusia comenzaba el sábado a vacunar a sus trabajadores de alto riesgo y otros países se preparaban para programas similares.

La OMS advirtió sobre lo que dijo era una creencia errónea: que la crisis del coronavirus se habrá terminado con la llegada de las vacunas, casi un año después del inicio de la pandemia que ha matado a 1,5 millones de personas en todo el mundo.

“Las vacunas no significan cero covid”, dijo el director de Emergencias de la OMS, Michael Ryan, quien añadió que no todos podrán recibir una dosis a principios de año.

El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, también advirtió contra la “percepción cada vez mayor de que la pandemia se acabó” con el virus aún propagándose rápidamente, lo que ejerce una enorme presión sobre los hospitales y los trabajadores de la salud.

La advertencia de la OMS se produce en momentos en que Estados Unidos registró un número récord de casos de COVID-19 por tercer día consecutivo el sábado, mientras el país se preparaba para lo que el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, ha llamado un “invierno oscuro”.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos recomendaron el “uso universal de mascarillas” en interiores y Biden dijo que reduciría su ceremonia de inauguración en enero para mitigar el riesgo del virus.

Varios países se preparan para la aprobación y despliegue de varias vacunas que han probado ser efectivas en los estudios.

Y en Rusia, la ciudad de Moscú empezó este sábado a vacunar a los trabajadores de la salud y los profesores con riesgo de contraer el COVID-19.