El proyecto que posibilita la donación de órganos entre personas vivas —incluyendo parientes por afinidad hasta segundo grado— fue aprobado de forma unánime en la comisión de Salud de la Cámara de Diputadas y Diputados.

La iniciativa, que está en segundo trámite constitucional y cuenta con urgencia suma, deberá votarse en la Sala de la Cámara para posteriormente, y de ser aprobada, convertirse en Ley de la República.

Al respecto, el diputado Andrés Celis, miembro de la comisión de Salud de la Cámara explicó que “el proyecto que aprobamos es fundamental para potenciar los trasplantes, cuestión esencial si consideramos que la disponibilidad de órganos actualmente es insuficiente, existiendo una lista de espera de receptores que asciende hoy en día a 2.700 personas”.

Parentescos por afinidad y declaración jurada

Hay dos puntos muy destacables de esta iniciativa, el primero es que se incluye la posibilidad del trasplante entre personas vivas que tengan entre sí parentescos por afinidad; lo que resulta totalmente lógico, considerando las relaciones de cercanía, amistad y cariño que pueden existir entre dos personas y, porque, además, según los expertos, no existen razones biológicas para que el donante sea exclusivamente familia”.

Como segundo punto, y en el marco de la tramitación del proyecto en el Senado, se incluyó que el donante al manifestar su consentimiento deberá declarar, bajo juramento, que efectúa la donación de forma gratuita y espontánea, libre de fuerza y de toda coacción“, añadió.

“Lo anterior es indispensable y muy pertinente, pues deja fuera cualquier intención de comerciar ilegal o clandestinamente órganos”, finalizó el parlamentario del distrito 7.