Una lamentable muerte de un menor de 11 años se registró el pasado fin de semana, en la ciudad de Santarém, norte de Brasil, cuando el niño jugaba con su teléfono celular, en el living de su casa.

De acuerdo a lo que informa el medio local O’Globo el día del deceso de Matheus Macedo, hubo fuertes lluvias y relámpagos en los alrededores de la mencionada ciudad, recibiendo una descarga eléctrica producto de la tormenta, ya que el dispositivo estaba conectado a la corriente.

“Todo fue muy rápido. Se presentó un cortocircuito, creo que estaban usando un adaptador para cargar los dispositivos en el mismo tomacorriente, pero solo Matheus recibió la descarga”, explicó su abuela María al citado medio.

matheus macedo
Matheus Macedo

Rápidamente el menor fue llevado en ambulancia a un hospital, al cual llegó con vida, incluso luego de sufrir un paro cardiorrespiratorio en el trayecto. Sin embargo, no pudo sobrevivir a un posterior ataque al corazón.

Más casos de lo que se creen

A pesar de que se cree que las muertes en estas circunstancias son poco frecuentes no es tan así, ya que según el informe policial, hay 44 casos de personas electrocutadas por usar teléfonos celulares conectadas a la energía eléctrica en dicho país, en lo que va del año.

No debemos conectar ningún artefacto a los enchufes durante las lluvias con rayos (…) Hay que tener mucho cuidado también con el uso de un celular conectado a la toma de corriente, sobre todo si tienes un auricular”, añadió Danilo Almeida, ejecutivo de la empresa de electricidad de la región de Para, el cual consignado por BioBioChile.

Por último, de acuerdo a Almeida, no es recomendable ocupar dispositivos conectados a la corriente con el cuerpo húmedo o en ambientes de las mismas características.