El fármaco dexametasona, que fue probado en Inglaterra con excelentes resultados en el tratamiento de casos graves de COVID-19, es fabricado en Concepción por el Laboratorio Pasteur. La empresa regional ya duplicó la compra de insumos para aumentar la producción.

La firma es el único laboratorio nacional que fabrica el esteroide en comprimidos y lo hace bajo el nombre de Cortyk, un poderoso antiinflamatorio e inmunodepresor.

Actualmente produce pequeñas cantidades, y su uso es indicado en casos de dolores reumáticos, lupus, alergias y también para aliviar los efectos secundarios de las quimioterapias.

En Reino Unido, los resultados del proyecto Recovery, que probó este medicamento por vía oral o intravenosa, se conocieron en las últimas horas y dan cuenta de una reducción de muertes de un 35% en pacientes que estaban con respirador.

Roberto Vega, uno de los directores del Laboratorio Pasteur, dijo que ya se están preparando ante la posibilidad de que su uso sea incorporado en los protocolos de manejo COVID-19.

Actualmente, el laboratorio penquista produce el fármaco en bajas cantidades y en formato de comprimidos, pero ya han tomado la decisión de aumentar la fabricación.

Hay otros laboratorios que importan el fármaco en formato inyectable y la empresa a regional espera también poder tener disponible el corticoesteroide en esta fórmula.

Fuentes médicas precisaron a Radio Bío Bío que la dexametasona estaba incorporada en algunos protocolos de manejo COVID-19 con indicaciones de baja dosis, haciendo hincapié en que no se trata de un medicamento de uso universal y que tiene tiempos y condiciones de indicación.

En efecto, se trata de un antiinflamatorio 10 veces más poderoso que otros de su tipo y que permanece en el organismo hasta 30 horas, por lo que su prescripción es de cuidado, de hecho se vende sólo con receta médica retenida.