Este miércoles el Ministerio de Salud confirmó el fallecimiento de la primera funcionaria de salud a causa del COVID-19. Se trata de Lorena Durán, de 42 años y madre de dos niñas.
Durán, que trabajó en el Consultorio General Rural de Lastarria en Gorbea (región de la Araucanía), estuvo 30 días en el área de pacientes críticos del Hospital Regional de Temuco y no presentó enfermedades de base.
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En el matinal Bienvenidos se contactaron con la cuñada de Lorena, la señora Teresita. Ella explicó que Durán comenzó con fuertes dolores de cabeza el 9 de marzo y por eso no pudo ir a trabajar durante toda esa semana.
“El día lunes 16 volvió a su trabajo, en el cual igual continuaba con dolores de cabeza. Le administraron suero, después la mandaron a su casa. El día martes estuvo en su casa y el miércoles volvió a trabajar al consultorio, en el cual nuevamente le colocan suero y ya la mandan para su casa”, señaló Teresita.
Ya el día jueves 19 de marzo su estado empeoró y su esposo la trasladó a urgencias del Hospital de Pitrufquen. Aquí le diagnosticaron neumonía, le dieron unos medicamentos y la mandaron para la casa.
“Siguió muy complicada y el día viernes ya no se podía su cuerpo, estaba solamente acostada. La noche del viernes, la llevaron urgencias nuevamente (en el Hospital de Pitrufquen) y desde ese día se mantuvo más complicada hasta fallecer“, agregó.
Desde Pitrufquen la trasladaron al Hospital Regional de Temuco, donde recién le realizaron el test de COVID-19, el que dio positivo dos días después.
“Perdió valiosos días, dos semanas de andar en hospitales, consultorios; en todas esas partes y no le hicieron nunca el examen“, declaró Teresita.
“En alguna oportunidad salió un aviso que decía que mi cuñada se había negado a hacerse el examen, lo cual eso es una mentira, mi sobrina la acompañaba y nunca le pidieron hacerle el examen, solamente cuando ya le internaron en el Hospital Regional de Temuco”, aclaró.
