En medio de su visita a un hogar de ancianos, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, se refirió a la ‘guerra comercial’ entre Estados Unidos y China, con una particular frase que no pasó desapercibida.

Todo ocurrió en el contexto de una presentación sobre el proyecto de modernización tributaria para adultos mayores. En el lugar advirtió que actualmente hay una serie de Eleam que son instituciones sin fines de lucro y de beneficencia, que reciben subsidio por parte de Senama y que se ven aquejadas por el pago de contribuciones.

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“Es por eso que el Gobierno del presidente Sebastián Piñera ha pensado que un aporte importante que podemos hacer en el proyecto de Modernización Tributaria es eximir del pago de contribuciones a los Eleam”, explicó el ministro, lo que tendría el objetivo de “aliviar la carga financiera de Establecimientos de Larga Estadía, que deben enfrentar los altos costos de mantención que implica el cuidado de un adulto mayor”.

Durante su explicación a los residentes de un Establecimiento de Larga Estadía (ELEAM) de Ñuñoa explicó que “si se solucionara la guerra comercial, tendríamos muy probablemente un aumento en el precio del cobre y una caída en el tipo de cambio”.

En medio del discurso, aprovechó la compañía de las monjas del hogar, para hacerles un especial pedido: “También le voy a pedir aquí a las madres que nos ayuden, a que recen para que se solucione la guerra comercial”.

En el encuentro con las 30 residentes del centro, le acompañó el director del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), Octavio Vergara.

Sus palabras gatillaron la respuesta inmediata de la senadora Ximena Rincón (DC), quien expresó que “no se entiende” la declaración del ministro, y que “hoy no existe preparación porque hay que rezar para que esta guerra comercial se solucione. Y no hay medidas concretas del gobierno que prometió tiempos mejores y excelencia”.

Tras los comentarios que surgieron a partir de la frase, el jefe de cartera explicó en el Muy Buenos Días lo que quiso decir: “Conté la buena noticia de que en el proyecto de modernización tributaria va a haber una exención de contribuciones para los centros de larga estadía de adultos mayores e instituciones que sean sin fines de lucro (…) la madre estaba tan contenta con esto que me dijo ‘ministro, voy a rezar para que aprueben el proyecto de modernización tributaria’, entonces yo aproveché de decirle ‘oiga, aproveche de rezar para que se termine la guerra comercial’. Fue una humorada”.