Un terrible accidente que provocó la muerte de un hombre de 36 años, dejó consternados a los habitantes de General Madariaga, en la provincia de Buenos Aires.

Se trata de un niño de cuatro años que le disparó accidentalmente con una carabina a su padre, quien recibió el impacto en un glúteo y falleció horas después en el hospital.

Todo comenzó cuando el menor de edad tomó el arma de su tío, una carabina calibre 22 y la accionó. Su padre, Ismael Raúl Montenegro (36), recibió el balazo en su glúteo izquierdo, tal y como señala el sitio Todo Noticias.

“Había dejado el arma ahí para guardarla y apareció mi otro hermano a visitarlo. La agarró el nene, no lo vio nadie y fue cosa de un segundo”, explicó Sergio, el tercer hermano de la víctima a Infobae.

Rápidamente los familiares del afectado lo trasladaron al hospital municipal. En ese lugar, los especialistas lo diagnosticaron con una “lesión vascular doble, con una vena y una arteria completamente seccionadas”.

Lamentablemente Montenegro murió mientras lo operaban. En este contexto, la Justicia caratuló el caso como “homicidio culposo” y hasta el momento no hay ningún imputado.

El hermano, la cuñada y la esposa de la víctima, fueron interrogadas por la policía. Además se les realizaron pruebas para determinar si alguno de ellos activó el arma de fuego.

Este mismo procedimiento se le hizo al niño, luego que los tres testigos señalaran que él había manipulado la carabina por accidente. Sin embargo, todavía se espera que se realice la autopsia al cuerpo de la víctima.