Conmoción causó el hallazgo de una niña de 2 años de Georgia (Estados Unidos) junto al cuerpo de su madre embarazada. Según informes forenses, la mujer llevaba 36 horas muerta cuando fue encontrada por su hermana y su casero, quienes escucharon el llanto de la pequeña.

La víctima fue identificada como Nakita Lashawn Holland, de 36 años, y recibió cuatro disparos por la espalda a través de la ventana, como confirma el medio estadounidense New York Daily News. Si bien la niña no sufrió lesiones, tenía los pies cubiertos por su sangre.

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La policía no está segura si ella habrá sido testigo de su asesinato, porque dormía en otra habitación; además, se han negado a realizarle una entrevista forense porque es “demasiado, demasiado joven”, como declaró el capitán Chris Dobbs.

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“Sólo espero que sea lo suficientemente joven para no recordar nada de esto más tarde. Esa es la parte más triste”, agregó. La mujer tenía 9 meses de embarazo y tenía una cesárea agendada para la semana entrante, para así poder dar a luz a su hijo. “Es devastador para una familia perder a una hija y su nieto y tener a otra nieta pasando por eso”, agregó el uniformado.