Un estremecedor caso de violencia intrafamiliar se registró en el estado de Washington, Estados Unidos, luego de que una mujer le cortara el cuello a sus hijos para que dejaran de meter ruido.

La misma madre de 28 años, Christina Booth, llamó al 911 para reportar que sus tres niños no paraban de llorar y “necesitaban atención médica”, como detalla CNN.

Al llegar la policía al lugar descubrieron una aterradora escena: sus gemelos de seis meses lloraban “incontrolablemente” mientras “sangraban de sus cuellos”. Su otra hija de dos años estaba oculta bajo las tapas de su cama, también sangrando.

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Aparentemente, la joven madre de tres niños veía una película junto a su esposo, Thomas Booth, bebiendo vino, cuando perdió completamente la cabeza. “Thomas dijo que se sentía intoxicado y que Christina estaba intoxicada al punto que arrastraba las palabrass”, detalló un oficial a este medio.

En un momento, la mujer subió las escaleras para meter los niños en la cama, pero “al poco rato, Christina bajó usando sólo su ropa interior, llorando y gritando”.

Esta le dijo a los policías que estaba pasando por un complicado momento porque los niños le daban trabajo y su esposo jamás la ayudaba. La madre estaba tomando medicamentos para la depresión post parto y quedó detenida, mientras los niños son tratados en un hospital de la zona.