De madre abnegada a mujer buscada por la justicia terminó Fereshta Angel Williams, una californiana de 38 años. Esta cometió un crimen que se está volviendo usual en Estados Unidos: tener relaciones con un menor de edad.
Todo comenzó con una pista anónima entregada a la policía, quienes comenzaron a seguir a la mujer durante semanas Finalmente, la atraparon teniendo sexo con un chico de 16 años, quien resultó ser el ex novio de su hija.
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Fereshta fue arrestada en el estacionamiento de un gimnasio abierto las 24 horas y posteriormente se descubrió que desde hace tres meses que mantenía relaciones con el adolescente, como detalla New York Daily News.
Es por esto que Williams fue acusada de tener sexo con un menor más de tres años joven, dos cargos por copulación oral a un menor y un cargo por intentar disuadir a un testigo. Ella lo ha negado todo y fue liberada tras pagar su fianza, mientras espera su primera cita en tribunales este 3 de febrero.
