Se vienen las Fiestas Patrias y con esto, un fin de semana de cuatro días que muchas familias aprovecharán para largarse a otros destinos. Pero durante el viaje, ¿quién cuida la casa? Mientras algunos han dejado al pastor alemán suelto y otros encargan el nidito al vecino, existe una buena porción de chilenos que decidieron instalar sistemas de alarma para sentirse seguros.

Los hay de distintos tipos y precios, pero hay una compañía en particular que está en el centro de la discusión: ADT. Sólo entre abril y junio, el departamento OS-10 de Carabineros recibió 26.742 falsas alertas provenientes de esta empresa, según informó Las Últimas Noticias.

Estas llamadas atiborraron la colapsada línea 133, la cual cobra 0,5 UF (alrededor de 12 mil pesos) por cada aviso fallido. Por lo tanto, ADT le está debiendo a los uniformados la cuantiosa cifra de 311 millones de pesos.

¿Qué hizo ADT? Presentar un recurso de protección en la Corte de Apelaciones. Carabineros tiene 5 días (contando desde el martes) para presentar un completo informe y así obligarlos a pagar la cuenta.

La empresa se defendió en un comunicado, diciendo que ni siquiera está correctamente definido por el decreto qué es una “falsa alarma” y aseguraron que se han rebajado en un 84% los avisos. Agregaron que “es necesario perfeccionar el funcionamiento de esta conexión”.

El problema se arrastra desde que se puso en marcha el sistema “Alpha III”, un programa que deriva las alertas directamente a la central de comunicaciones de la policía. Desde sus primeros días de funcionamiento (a comienzos de abril de este año) ya se había alertado que ADT era parte del grueso de los problemas, según consignó La Nación.