Se acerca del Día del Padre y tal parece que el hombre que mostraremos en esta nota no recibirá un regalo muy grande. Este decidió jugarle una pesada broma a su hija, invitándola a acercarse a un enorme ganso silvestre que reposaba al otro lado de un espejo de agua.

Al principio, el ave no reacciona y hasta se aparta de ella; no contento con esto, su padre la invita a acercarse un poco más. Pronto se escuchan los aterrorizados gritos de la niña, “¡él viene por mí!”, mientras emprende carrera a toda velocidad de regreso con su progenitor.

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Este ni siquiera se molestó en ayudarla y se dedicó a grabar y reírse con la escena… al menos, hasta que se da cuenta de que está llorando. El hombre subió el video a Youtube escribiendo “una típica noche de viernes con mi hija amante de la naturaleza”.