Esta mañana en el Muy buenos días se generó una entretenida discusión que afecta directamente al universo de la tele: la falta o carencia de animadores, una realidad cada vez más latente en la pantalla chica, según una columna de opinión expresada a través de Las Últimas Noticias.
El asunto no podía quedar libre de discusión, pero fue Jaime Coloma quien se encargó de realizar una crítica a este fenómeno abordado durante la revisión de la prensa al inicio del matinal, y disparó contra aquellos personajes que trabajan detrás de las cámaras, sus jefes.
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“Chiquillos con todo respeto, pero esto no tiene que ver con los antianimadores. Bueno, si quieren que no venga mañana me avisan”, pronunció antes de disparar lo siguiente: “Creo que los que están detrás de pantalla son los que parece que no leen al público”, deslenguó Coloma.
Su declaración produjo una rápida reacción por parte de los demás integrantes del panel, junto a la automarginación de Coloma frente a las cámaras y ante el abierto debate de la extinción de los animadores y su reemplazo por conductores televisivos.
Una vez calmada la efervescencia, Coloma se reintegró a la discusión e incluso se atrevió a pronunciar -a su parecer- cuál es el rostro que más le gusta en la animación. “A mi me gusta mucho la Diana Bolocco, no sólo por un tema físico. Me parece divertida, cercana”, lo que no replicó hacía el género masculino.
“Creo que los hombres estamos al debe (…) El discurso que dice (LUN) de Karol Dance a mi me parece súper relevante -que no tiene que ver con Karol, yo lo conozco, me parece un gallo súper simpático y divertido-, pero efectivamente es un gallo que sigue estableciendo discursos misóginos que hablan de la mujer como objeto. Son discursos que están obsoletos en la sociedad actual, además que tienes que estar a caballo en lo que está pasando”, opinó Jaime sobre la imagen actual del hombre en la animación.
De todas maneras también realizó una observación crítica a la sociedad. “Antes se daba el ancho porque no había un criterio más crítico, de verdad las audiencias eran mucho más pasivas”, remató Coloma.
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