Tras duros entrenamientos, estrictas dietas y una operación de bypass gástrico -procesos que se extendieron por cerca de dos años-, Nicole Rojas se convirtió en una de las ganadoras de “Peso Pesado”. A días de que se mostrara su historia en el programa de Mega, la madre de dos hijas contó detalles de su nueva vida al matinal “Mucho Gusto”.
Según lo visto en el programa de baja de peso a principios de agosto, Nicole sufría porque no podía tener intimidad con su esposo, debido a lo acomplejada que estaba con su cuerpo, y porque sus 117 kilos de peso estaban causando roces entre ella y su hija mayor, que la retaba como si fuera su mamá.
No obstante, tras una serie de entrenamientos, cambios alimenticios y guía de profesionales, la ama de casa pudo cambiar su estilo de vida y perder la impresionante suma de 50 kilos.
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En conversación con el matinal de Mega, la joven recordó cómo era su obsesión con la comida: “Yo sabía que tenía algo en el refri, y si eso estaba ahí, no me lo quitaba de la mente hasta que no estuviese ahí”, declaró.
“Me emociono y me cuestiono cómo pude llegar a eso… uno no se da cuenta. Recuerdo exactamente el día en que me di cuenta (de lo obesa que estaba)”, dijo, revelando que se percató de su estado un día que, tras salir de la ducha, se miró desnuda de pies a cabeza y quedó en shock.
Actualmente, su vida tiene un foco saludable, centrado en la alimentación sana y en la realización de ejercicios. “El deporte es una terapia. Más allá de lo que tú logras en resultados físicos, uno va al gimnasio y llega a la casa sin estrés, llega sin cargas, más livianita, y psicológicamente te sientes bien porque dices: ‘hice algo por mí'”, afirmó.
Pese a ello, confesó que no es fácil: “yo me propongo que voy a estar ordenada con mis comidas, y es un desafío diario. En realidad, es súper difícil. Yo me miro y, claro, me siento más bonita, mi autoestima está más alta, pero no es fácil“.
Consultada sobre qué fue lo que más le costó durante su proceso de transformación, Nicole afirmó que lo más duro “fue que tuve que dejar harto de lado a mi familia porque, por primera vez, me dediqué a mí misma. Yo fui mamá, pero no sólo tuve a mis hijos, sino que los crié, trabajé por ellos, estuve a cargo de su colegio, fui mamá 24/7. Entonces, cuando entré a este proceso tuve que dejar mucho de eso de lado”.
Finalmente, declaró que su adicción a la comida partió como un “pecado” y no como una carencia: “Yo creo que en la mayoría de los casos (de obesidad) es una carencia. En mi caso, fue gula”, declaró, explicando que siempre ha tenido una vida feliz y que nunca atribuyó su desorden alimenticio a una necesidad insatisfecha.
Cabe recordar, que Nicole llegó al programa con el objetivo de cambiar su vida y perder parte de los kilos de más que la atormentaban. Un desafío que no fue nada de fácil, pero que con la ayuda de sus seres queridos y los especialistas del Centro de Tratamiento para la Obesidad UC Christus, pudo sortear. Si quieres conocer las declaraciones completas de Nicole, ve aquí el video de Mega.
