En noviembre del año pasado Melina Figueroa se fue a vivir a México para probar suerte en la televisión de ese país. En el verano participó de varios castings y concursó en una competencia de conductoras del canal Telehit, llamada New generation.

Pero ese proyecto se vio interrumpido luego que la llamaran desde Chile para integrarse al exitoso reality de Mega Amor a prueba. Allí grabó un poco más de mes y medio y regresó a tierras aztecas, decidida a cumplir su propósito.

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Me vine para crecer. Estuve haciendo castings y quedé para un proyecto de Televisa. Hago cápsulas de fitness mostrando todas as disciplinas”, señaló a LUN, la ex Mundos opuestos, agregando que durante este mes su trabajo debería salir en pantalla por el canal 5 de Televisa.

Respecto a su nueva vida en el norte del continente, Melina señaló que gran parte del día lo dedica a sus ejercicios, revelando una sacrificada rutina que la mantiene en forma. “Me levanto a las 6 de la mañana y voy a un parque que está a 40 minutos de mi casa, en el barrio Condesa. Ahí gago un entrenamiento parecido al crossfit, bastante intenso, durante una hora, y en la tarde, corro una hora y después hago 45 minutos de pesas, pero con cargas livianas, para tonificar mi cuerpo y mantenerme. Así no genero hipertrofia muscular”, explica.

Cabe señalar que en agosto pasado la argentina confesó a través de su cuenta de Instagram, que durante el 2009 sufrió anorexia, lo que la dejó pesando 39 kilos, casi una decena menos de los que actualmente pesa. Es por eso que decidió comenzar una vida sana y ligada al deporte, para no tener que volver a pasar por una enfermedad así nunca más.

No como nada que no sea natural. Muchas frutas y verduras, con carne blanca y desayuno avena para tener una buena carga de carbohidratos. Es un esfuerzo lindo, lo disfruto. Bajé tres kilos, pero cambié grasa por músculo y por eso me veo más marcada”, remata.

Sobre si situación sentimental, confesó que está soltera hace tres años, y que su última pareja fue Andrés Longton, una ruptura que le afectó “muchísimo”, pero que le sirvió para aprender a estar sola y preocuparse por su futuro y trabajo.