Amelia Bannan sufrió un grave accidente automovilístico estando embarazada. Tenía 6 meses de gestación y sufrió una severa lesión cerebral.

El 1 de noviembre. Amelia, quien era policía en la localidad misionera de San Pedro, en Argentina, se subió al auto convencida por sus colegas a pesar de haber tenido un presentimiento.

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“No viajemos, si subimos a ese auto será solo para volcar”, le dijo Amelia a una compañera horas antes del accidente. A medio camino el móvil en el que se transportaban fue chocado por atrás y se estrelló.

La mujer fue internada en estado crítico, afortunadamente sus cuatro colegas resultaron ilesos y además ocurrió el milagro: el bebé sobrevivió en su vientre. 

El feto continuó creciendo de manera relativamente normal a pesar de la inconsciencia de su madre. Amelia abrió los ojos, movió las manos  a fines de diciembre. No era capaz de comunicarse ni decir palabra, pero a pesar de aquello la naturaleza actuó y la embarazada comenzó a tener contracciones.

El pequeño Santino, nació Nochebuena, el 24 de diciembre, luego de una cesárea de urgencia ya que su madre no dilataba. Santino pesó 1,890 kilos y permaneció un mes en la unidad de cuidados neonatales, mientras su madre volvió a caer en un profundo coma. 

“Santino nació y crece bien, no tiene una complicación de nada”, comentaba entonces César, el tío del niño, que además relató el sufrimiento por el que pasaron como familia al ver el estado de su hermana

“Era desesperante. Todos los días era hablarle de cosas nuevas, acercarle al bebé, pero no había respuesta”, asegura César, según consigna El País de España.

Pero un segundo milagro estaba por ocurrir, luego de una rápida recuperación, Amelia abrió los ojos, comenzó a contestar y a recordar y a los 3 meses y medio pudo conocer finalmente a su bebé.

Esta semana las buenas noticias siguen sumándose a la inspiradora historia. Según informó el portal argentino Todo Noticias, la madre pudo celebrar su cumpleaños acompañada de su hijo, su marido y sus queridos hermanos.

“Muy, pero muy, feliz cumple Amelia Bannan.  EMOCIONADOS. Volvió la sonrisa a nuestras caras. Los cuatro hermanos juntos. Después de tanta agonía, desesperación y tristeza, volvió la felicidad a nuestras vidas. Una tarde maravillosa. Amelia nos contó chistes, habló por teléfono con papá, nos saludó con dos besos y agradeció los regalos”, escribió César en su cuenta de Facebook, dando cuenta de la bendición de tener de vuelta a la madre de Santino.

Aún queda mucho proceso de recuperación para la valiente Amalia, según indican los médicos sigue siendo una paciente de riesgo, sin embargo, para su familia, el milagro ya está hecho.