Una joven estadounidense aseguró haber sido acosada por su jefe, ocho años mayor, por un periodo de dos años. Y a pesar de que lo rechazó en varias ocasiones, continuó acosándola.
El sujeto, Josh Davidson, habría acosado a Emily Houser con regalos que ella constantemente rechazaba e incluso aparecía en la noche en su casa sin previo aviso.
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Pese a que Emily, quien actualmente tiene 18 años, reportó el caso en la administración de la cadena de restaurantes Chili’s restaurant, la reacción no fue la esperada. Esto porque en vez de despedirlo, simplemente lo transfirieron a otra sucursal.
¡Y eso no fue todo! Los colegas de la joven no encontraron nada mejor que organizarle una fiesta con una gran torta que decía “Fuck, Emily Houser” (Jódete, Emily Houser), luego que hiciera pública su denuncia.
En conversación con Buzzfeed, la estudiante oriunda de Pensilvania, confesó que Davidson confesó a fijarse en ella poco tiempo después que comenzara a trabajar en el restaurant, y durante dos años la acosó sexualmente, incluso una vez se presentó en su escuela para pedirle que fuera su novia. También la visitaba en su casa para invitarla a salir.
“En mi cumpleaños número 18, él apareció en el estacionamiento de mi escuela y me llevó regalos para pedirme oficialmente que fuera su novia frente a muchas personas. Le dije que no y él respondió de una manera muy pomposa que no le importaba si lo despedían con tal de estar juntos, y que no le importaba perder su trabajo porque solo quería estar conmigo“, señaló.
Luego de este rechazo, el joven de 25 años habría comenzado a agredirla verbalmente en el trabajo. Emily no lo había denunciado hasta que se dio cuenta que Davidson había fijado su interés en otra joven que había llegado recién a la sucursal. Fue entonces cuando se dio cuenta que tenía que detenerlo.
Primero le advirtió a Josh y le dio un plazo de dos semanas para que se detuviera, pero tras una investigación de la administración del restaurant, el sujeto fue trasladado a otra sucursal de la cadena y los empleados organizaron una fiesta para avergonzar a Emily.
Diversos empleados compartieron fotos del pastel en redes sociales, junto a ofensivos mensajes, sin embargo, al poco tiempo fueron eliminados.
