En diciembre del año pasado, Soth Rey, una joven de 18 años residente de Siem Riep, Camboya, contrajo una enfermedad que le generó una compleja infección en la nariz y, posteriormente, una necrosis que le ha consumido la mitad del rostro.

Esta enfermedad consiste en la muerte de las células debido a un agente invasor o una deficiencia inmunológica, que en el caso de Rey se habría producido por una especie de sinusitis o alergia invasiva.

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Tan duro es el caso de la joven, que incluso su familia había perdido la esperanza de salvar a su hija, luego de que dos hospitales públicos rechazaran atenderla.

Sin embargo, una generosa doctora canadiense, llamada Yulia Khouri, decidió ayudar a Soth en su tratamiento luego de conocer su historia a través de redes sociales.

“(Los doctores) han visto muchos desastres, pero son resultado de accidentes automovilísticos, víctimas de quemaduras, incendios, ácido, pero esto es carne pudriéndose de forma natural, es una pesadilla, una película de terror, sólo puedo imaginar la cantidad de dolor que la chica ha sufrido”, señaló Khouri, tal y como consigna Emol.

Las donaciones de esta doctora, y de otras anónimos, permitieron que la muchacha ingresara el pasado 26 de febrero al hospital privado Sen Sok International de la capital camboyana. Soth llegó con 41 grados de fiebre, una neumonía septicémica, deshidratada y con sólo 35 kilogramos de peso debido a la malnutrición.

Cabe recordar, que en diciembre de 2016 la familia asistió al hospital, donde un médico intentó curarla con medicamento y realizarle una cirugía en la nariz, para posteriormente retirar los dientes superiores con el propósito de detener la infección.

Después de esa intervención, la joven no pudo ser atendida otra vez por falta de recursos económicos. Su familia optó por la medicina natural, sin obtener mayores resultados.

Cuando el personal médico, enfermera o doctor, ve a una persona que tiene una condición crítica, sangrado, fiebre alta, convulsiones, tenemos que detener esta condición, después podemos hablar de ingresar al paciente o transferirlo, de pagar o no pagar”, señaló la subdirectora de Sen Sok, la doctora Tatiana Turobova.

Según datos de la OMS, el 80 % de la población camboyana vive en zonas rurales y la mitad recurre a practicantes de medicina sin cualificación, que en muchas ocasiones son autodidactas y cuentan con escasos medios.

Revisa un video de la joven a continuación: