Una mujer estadounidense de 29 años, ha luchado gran parte de su vida contra la anorexia, sin embargo, a comienzos de noviembre de este año, se dio por vencida. La joven pidió no recibir más agua ni alimento y sólo ser tratada con cuidados paliativos.

Desde hace dos años la mujer, quien solo ha sido identificada con las iniciales A.G., se encuentra internada en un hospital psiquiátrico de Nueva Jersey, donde sólo se alimenta de bebidas dietéticas, café negro y bocados ocasionales de comida.

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Actualmente pesa 31 kilos y sus huesos tienen la densidad equivalente a una persona de 92 años, y aunque fue diagnosticada con una depresión crónica y alcoholismo, un juez de la localidad, determinó que la mujer posee la capacidad mental para elegir no ser alimentada a la fuerza, tal y como señaló el sitio Emol.

Al parecer, A.G. está consciente de su decisión, la cual de seguro la llevará a la muerte. Según los medios norteamericanos, la joven argumenta que la alimentación forzosa sólo la llevará a estar gorda. El administrador del hospital donde se encuentra la mujer, señaló que con el retiro de la alimentación forzosa, la corte esencialmente le está permitiendo su suicidio pasivo.

Por otro lado, los padres de la mujer afirmaron que por más de 10 años han intentado detener la anorexia de su hija, sin embargo, respetan y aceptan la decisión de sólo recibir cuidados paliativos. “Ella no tiene paz (…) Nunca ha tenido un momento de relajo. Está atormentada”, declaró su madre al periódico Daily Record.