De acuerdo a The Sun, la mujer de origen australiana -quien prefirió no revelar su identidad- se encuentra totalmente devastada luego de haberse enterado de la cruda verdad que su marido le escondió por más de ocho años, y lo peor que él jamás le contó sino que ella se dio cuenta por las malas consecuencias que eso le trajo.

Y es que después de un fallido matrimonio, la mujer (30) conoció al “hombre de sus sueños”, ambos se enamoraron profundamente, de hecho fue tanto que poco tiempo después decidieron casarse y tuvieron a un hijo. Todo parecía feliz hasta que su marido comenzó a cambiar su actitud, convirtiéndose en un controlador y dominante hombre.

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La relación se comenzó a desgastar, por lo que la mujer decidió que era mejor separarse para dedicarse de pleno a ser madre. “Nuestro matrimonio no duró, lo dejé después de un violento episodio. Intenté que la situación mejorara, pero su comportamiento fue cada vez peor, mejor terminé con él para dedicarme a mi hijo“, aseguró al diario británico.

Sin embargo, ocho años más tarde se enteró de una terrible noticia, algo que jamás se imaginó. “Ocho años después comencé a enfermarme, iba y venía del hospital, mi salud estaba deteriorada. Tenía hongos, mi pelo se caía y bajé rápidamente de peso. En una de las visitas al doctor él me dijo ‘¿No crees que tienes cáncer?’ Y yo le dije ‘¡No sea ridículo!'”, señaló.

Luego agregó: “Me hice unos exámenes los que revelaron que tenía un cáncer en el cerebro y también tenía un problema en el sistema inmunológico, por lo que ellos me solicitaron que me hiciera el examen de VIH. Dos días más tarde los médicos me dijeron que salió positivo. Mi primer pensamiento en ese momento fue mi hijo, pero gracias a Dios que el examen le salió negativo”.

Tras enterarse de la peor noticia de su vida, la mujer llamó furiosa a su ex pareja. “Muy enojada le dije ‘¿Te diste cuenta de lo que hiciste? Jugaste a la ruleta rusa conmigo, me pusiste en riesgo a mí y a nuestro hijo. Fue como disparar dos balas, pero solo le diste a una, a mí’. Él sólo cortó y jamás supe nada más de él”, finalizó.

Cabe señalar, que la madre se mantuvo en el hospital por dos meses y se encuentra tomando 72 píldoras al día. Además, lamentablemente perdió la vista en su ojo izquierdo, pero sigue luchando para ser la mejor madre para su hijo.