Es parte de la rutina diaria de muchos tras salir de la ducha: aplicarse talco en los pies. ¿Pero hay algún riesgo en esta práctica?

Eso quisimos averiguar en Página 7, y la Técnico Podólogo Clínico, de la Universidad Santo Tomás, Carolina Ruiz, despejó nuestras dudas.

Según aclaró la especialista, “Existe cierto riesgo si utilizamos el talco en exceso, ya que, es un polvo (mineral) de partículas pequeñas y al aplicarlo en gran cantidad provoca que nuestros poros se tapen. Nuestra piel es un órgano absorbente (permeable) y por tal razón nuestra piel necesita respirar o tener contacto de aire”.

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“Si el paciente presenta una hiperhidrosis (exceso de sudoración) al utilizar mucho talco formará una capa de masa húmeda que permitirá un caldo de cultivo de gérmenes patógenos que nos podrían causar una dermatomicosis (hongo en la piel), ya que esta patología necesita calor, oscuridad y humedad para poder producirse”, explicó Ruiz.

Por otra parte, señaló que “si el paciente tiene una anhidrosis (sin sudoración o piel reseca), éste aumentará la resequedad de la misma, además de presentar descamación de la piel.

West Point - The U.S. Milita (cc) | Flickr
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Frecuencia y cómo aplicarlo

La Técnico Podólogo Clínico recomienda el uso diario del talco, pero la cantidad y el dónde se usa es importante conocerlo.

1. La cantidad debe ser no más que la tapa de un lápiz bic para ambos pies.
2. El lugar donde podemos ponerlo es directo en el zapato o calcetín.

Sobre este último punto, aclara que el calcetín debe ser de hilo o algodón, ya que son productos que absorben humedad, y el calcetín sintético no lo hace.

Así también, la especialista agrega que existe un producto que podría reemplazar al talco, y éste es la crema hidratante con óxido de zinc. Según explica, no debe aplicarse entre los dedos, sino que sólo en el dorso (empeine) y en la planta del pie.

Receta para un talco hecho en casa

La docente de Aromaterapia de la misma universidad, Camila Santa María, recomendó unas simples recetas para aplicar sobre nuestros pies y mantenerlos más sanos:

Piel normal
1. 100 o 150 grs. de crema espesa con vitamina E y Urea (opcional).
2. ½ cucharadita rasa de té de óxido de zinc.
3. Mezclar y aplicar en dorso y planta todos los días.

Piel Reseca
1. 100 o 150 grs. de crema espesa con vitamina E y Urea (opcional).
2. 1 cucharadita rasa de té de óxido de zinc.
3. Mezclar y aplicar en dorso y planta todos los días.

Finalmente, la especialista Carolina Ruiz, hizo un llamado al autocuidado, aclarando que el lavado de pies debe ser con agua tibia y jabón neutro (glicerina), sin dejar remojar más de 5 minutos. Luego se debe secar prolijamente el pie con papel absorbente (toalla nova, confort o servilleta), con especial cuidado entre los dedos, y usar el secador de pelo con aire frío-tibio para aplicar en los pliegues donde no llega el papel ¡No descuides tus pies!

Matt and Rachel (cc) | Flickr
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