Una mujer recibió una foto que no solicitó y de alto contenido sexual de parte de un extraño, por lo que decidió darle una prueba de su propia medicina.
Samantha Mawdsley tiene 30 años y acababa de comentar una crítica positiva en la página de Facebook de un restaurant que había visitado recientemente, cuando de repente un hombre llamado James, comentó en su post y le dijo que revisara sus mensajes.
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“Él comentó diciendo que revisara los mensajes para que pudiera darle mi opinión“, señaló al medio inglés Metro.co.uk.
Obviamente, Samantha no tenía idea sobre lo que James necesitaba opinión, por lo que fue a revisar sus mensajes. Y cuando lo hizo, se pilló de frente con una foto del pene de James.
Como era esperable, Samantha se sintió bastante molesta y pasada a llevar. “Había leído sobre estas cosas pero como estoy en una relación amorosa hace tres años, antes de Tinder, que nunca pensé en ver algo así de primera fuente“, indicó.
Al comienzo pensó que lo mejor era ignorarlo, así que no respondió nada y decidió irse a dormir. “Hasta ese minuto aún no lo había bloqueado, así que tuvo cerca de ocho horas para disculparse o algo“, agregó.
Pero luego de despertar y ver que no había ninguna disculpa ni nada parecido, decidió que podía darle algo de su propia medicina y ver cómo disfrutaba de ver fotos de penes al azar.
“Decidí meterme con él y su ridículo comportamiento y doble estándar y para mi disfrute quedó bastante afectado“, comentó Samantha.
Fue así como la joven decidió enviar varias fotos de este tipo que pilló en internet y la reacción de James fue algo sorprendente. “Mi parte favorita es cuando dijo ‘¡Quiero vomitar! ¡Por favor, para!’“, señaló la mujer.
Sí, al tipo no le gustó para nada la venganza de la mujer que él decidió acosar, pero ella no se detuvo ahí, pues le envió todas las fotos posibles con tal de asegurarse de que se sintiera tan incómodo como se sintió ella.
Luego que él le rogara que se detuviera y ella le respondiera con #WithFelipe, el sujeto quedó aún más sorprendido pues no sabía a que se refería. Cabe señalar, que ese “hashtag” es una referencia a la cuenta de Instagram manejada por una mujer llamada Alexandra Tweten, donde las mujeres comparten capturas de actos abusivos en plataformas de citas.
Brillantemente, Samantha documentó todo el intercambio de mensajes y lo posteó en Facebook, usando diversos emojis para censurar el vasto número de fotos que le envió a James. Y han sido más de 7 mil las personas que han compartido el álbum de fotografías.
Pese a toda la revuelta, la joven aseguró que si James simplemente se hubiese disculpado, nada de esto habría pasado. “Él no sintió ningún remordimiento y asumió que yo me quedaría callada“. Luego, él le comentó que no tenía derecho a humillarlo, pero de la manera que yo lo veo es que me violentó, me señaló y me asustó”, agregó.
Samantha ha recibido un montón de comentarios de apoyo, sin embargo, hubo un sujeto que no estuvo de acuerdo con su actuar y decidió enviarle una foto de su pene, para “mostrar su apoyo” al otro individuo.
Si bien James respondió algunos de sus mensajes, no puede hablarle más porque finalmente lo bloqueó.
De acuerdo al medio, ella reveló más tarde que decidió hacer esto porque no es la primera vez que le ocurre algo similar. “He sido víctima de esto en persona y el sentimiento inicial es la misma. Un tipo se sentó al lado mío en un biblioteca pública cuando tenía 15 años y usaba uniforme escolar. Él comenzó a masturbarse mientras me miraba. ¿Mi respuesta? Me moví en mi silla para no poder verlo. No hice nada más y el sabía que me quedaría callada y las mujeres lo hacen tan a menudo“, reveló.
Por último, señaló: “Los hombres que hacen este tipo de cosas, asumen que quedarán en el anonimato y pueden invadir nuestro espacio. ¡No más!“.
