Una joven que por años sufrió de anorexia severa, y que estuvo a punto de morir, reveló cómo el hecho de luchar por su sueño, convertirse en una modelo, la ha ayudado en su lucha contra la enfermedad.
Alice Mitchell tiene 18 años y es oriunda de Canterbury, Inglaterra. Actualmente pesa 57 kilos pero hubo un tiempo en que llegó a bajar tanto de peso que su pelo comenzó a caerse y sus órganos dejaron de funcionar normalmente.
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A pesar de que la adolescente llegó a pesar apenas 30 kilos en su peor momento, Alice continuaba pesándose mínimo 40 veces al día, con las esperanza de perder más y más peso.
Actualmente, ella se encuentra en vías de recuperación, y asegura que todo se debe a su ambición de convertirse en una modelo.
“Siempre he estado muy preocupada por mi carrera, por eso cuando estaba en mi peor momento, sabía que necesitaba mejorar para así tener mejores chances de convertirme en una actriz y modelo“, aseguró al medio inglés The Sun, agregando: “Cuando estaba mal apenas podía comer una cucharada de comida, y si lo hacía me tomaba mínimo tres horas, mi cuerpo estaba tan cansado que apenas podía respirar normalmente“.
La joven llegó al límite en que los médicos le dijeron que si no paraba con sus malos hábitos moriría dentro de un mes, fue recién ahí que decidió hacer algo al respecto.
“Solía odiar lo que veía en el espejo, pero modelar me ha vuelto mucho más segura, es demasiado divertido además“, indicó.
Antes de que Alice se volviera anoréxica cuando tenía 15 años, la joven sufría de un trastorno de “atracones”, donde podía llegar a consumir cerca de 4500 calorías por día. Eso fue entre los 7 y 11 años.
“Volvía del colegio, y me armaba un plato gigante de papas fritas, torta, helado, queso, frutas, carne, etc, antes de cenar. Fue entonces cuando comenzaron a burlarse de mí por ser gorda y eso terminó teniendo un gran impacto porque nunca me gustó la manera en que me veía“, afirmó.
Así fue como la anorexia comenzó a apoderarse de ella, llegando a límites en que ni siquiera podía levantarse durante días, hasta que le dijeron que le quedaban aproximadamente cuatro semanas de vida, en 2013.
En los últimos dos años ha subido hasta los 57 kilos, aunque reconoce que ella nunca se recuperará totalmente.
“Nunca podría decir que he vencido a la anorexia, no creo que me pueda recuperar totalmente. De hecho, recuerdo cuando pesaba 30 kilos como si fuera ayer“, confesó.
Alice señala que una de las cosas que más le ha ayudado es cocinar sus propias comidas, pues le ha permitido experimentar con diversos alimentos y recetas, y eso le genera apetito y disfruta mucho más sus comidas.
Asimismo, la joven abrió un blog personal orientado a ayudar a otras personas con trastornos alimenticios, ofreciendo consejos y otros tips.
“La única cosa que puede decirle a alguien que esté luchando con la anorexia, es que es una cosa completamente normal y que tiene que ver con la salud mental y no hay porqué avergonzarse. Nadie más puede hacer que te recuperes, pues es algo que debes hacer por tu propia cuenta. Creo que concentrarse en algo más, como mi carrera, es la mejor manera de comenzar tu recuperación”, remató.
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