Christine Carter es oriunda de Texas, Estados Unidos, tiene 28 años y hace un tiempo enfrentó la más dura de sus batallas: perder peso.

Fue así como la mujer que llegó a pesar 127 kilos en su estado más crítico, terminó deshaciéndose de 70 kilos. En ese entonces, Christine tomaba más de 10 medicinas diferentes y debía tener chequeos médicos constantemente, hasta que decidió darle un giro en 180 grados y recuperar su vida.

Lee también: [FOTOS] Hombre bajó 30 kilos en 3 meses comiendo solo papas y bebiendo cerveza

En tan solo 16 meses la mujer bajó de peso y terminó una tormentosa relación sentimental y que influyó directamente en su aumento de peso.

De hecho, con su nueva apariencia logró que su pareja en ese entonces se volviera aún más celoso, por lo que finalmente optó por terminar su relación.

Carter comenzó su trabajo de pérdida de peso con ayuda de un entrenador personal y una banda gástrica. Fue así como cumplió su objetivo en diciembre de 2015, y un año más tarde volvió a estar soltera.

Christine Carter | Instagram
Christine Carter | Instagram

Pero eso no fue todo, pues también se sometió a una abdominoplastía y se puso implantes mamarios, procedimientos que le permitieron aumentar aún más su confianza en sí misma y autoestima.

Actualmente, una nueva Christine asegura que no puede estar más feliz y es por eso que se ha encargado de compartir su historia con sus más de 43 mil seguidores en Instagram.

Viví un par de situaciones que hicieron que mi peso se disparara. Dejé de fumar y orienté mi adicción a la nicotina hacia la comida. El otro factor que influyó fue mi infeliz relación sentimental”, comentó Christine al medio inglés The Mirror.co.uk.

Él era muy controlador, me decía cómo tenía que vestirme, me quería más y más gorda porque así jamás podría dejarlo, e incluso no me dejaba tener mis propios amigos”, indicó, agregando: “Estar con sobrepeso me hacía sentir que no merecía nada mejor, pasé de ser una ‘gorda feliz’ a simplemente ser una ‘gorda’”.

La estadounidense recuerda que en ese entonces se lo pasaba comiendo carbohidratos y azúcar, y que pensaba constantemente en comida.

Christine Carter | Instagram
Christine Carter | Instagram

Me levantaba y comenzaba a comer durante todo el día, y a veces también comía en medio de la noche”, reveló.

La mujer estaba en tan mal estado físico que incluso le costaba subir escaleras, debiendo descansar en la mitad de su trayecto para tomar aire.

Luego de probar numerosas dietas, desesperada decidió que debía someterse a una cirugía, y fue así como lograron removerle el 70% de su estómago, ayudándola a perder cerca de 24 kilos en agosto de 2014.

No obstante, comenzó rápidamente a ganar peso nuevamente, por lo que Christine entendió que también debía hacerse cargo de su salud emocional. “En vez de lidiar con mis emociones, comía”, recuerda.

Christine Carter | Instagram
Christine Carter | Instagram

Afortunadamente, la joven encontró un entrenador personal quien la puso a trabajar en una dieta saludable, con ejercicio físico y también se ocupó de su bienestar mental.

Perder peso ha cambiado mi vida por completo. No soy la misma chica que era en aquel entonces. Terminé mi relación, pues mi ex se volvió más inseguro aún y celoso a medida que yo iba ganando más confianza en mí misma, así me di cuenta que estaba en una relación poco saludable y decidí salirme de allí”, agregó.

Christine Carter | Instagram
Christine Carter | Instagram

Profesionalmente también aseguró que le ha servido, pues se le han presentado oportunidades que cuando estaba con sobrepeso simplemente no podría haber tomado.

A medida que los kilos se iban yendo, fui transformándome en alguien con mayor confianza, dedicada, en esa mujer trabajadora que siempre estuvo ahí pero que tenía demasiado miedo como para exponerse. Cuando veo fotos antiguas no me reconozco, es como si nunca hubiese conocido a esa persona”, agregó.

Christine Carter | Instagram
Christine Carter | Instagram

Es por eso que Christine quiere compartir su historia con todas las personas que estén pasando por un proceso similar al que ella vivió, para demostrarles que sí se puede. Además, aconsejó que las personas deben fijarse pequeñas metas e ir de a poco, pues así va aumentando la confianza y autoestima, lo que es motor fundamental para asumir desafíos mayores.