Es común que cuando compramos vegetales queremos que se mantengan frescos y saludables por el mayor tiempo posible, y una de las formas más sencillas es refrigerarlos.

Esa es una decisión inteligente porque funciona para gran parte de los vegetales, sin embargo, existe un vegetal que por nada del mundo debes almacenar en tu refrigerador: papas crudas.

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De acuerdo a lo que informa el medio inglés Metro.co.uk, exponer este vegetal a bajas temperaturas, afectaría negativamente su sabor. El frío hace que el almidón de la papa se convierta en azúcar más rápidamente, lo que te deja una papa más dura y dulce.

Pero existe una razón mucho más relevante para que dejes de hacerlo.

Una vez que el almidón se convierte en azúcar, esto puede provocar una reacción química potencialmente dañina cuando cocinas tal vegetal. De hecho, La Food Standards Agency (FSA) (Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido, en español), explica que cuando coces o fríes una papa, aquellos azúcares se combinan con el aminoácido conocido como asparagina, y dan paso a la acrilamida química.

La acrilamida es un carcinógeno genotóxico que se ha relacionado con un mayor riesgo de cáncer. Eso sí, la FSA reconoce que se está trabajando en más investigaciones que establezcan los efectos a largo plazo del consumo de grandes cantidades de acrilamida.

Entonces, ¿Cuál es la solución? Almacena tus papas en la despensa. Se conservarán mejor en una bolsa de papel en un lugar a fresco y oscuro.