Dicen que el amor de un hijo hacia su madre es infinito y prácticamente inquebrantable. Es un lazo eterno que a pesar de las dificultades siempre encuentra un modo de renacer.
En el día de los enamorados son muchas las madres que ya no tienen una pareja y es ahí cuando el amor de sus hijos puede resultar fundamental. Así lo demostró el pequeño Max Schofield, de tan sólo 4 años, que para que su madre no pasara San Valentín solita hizo algo que seguramente derretirá tu corazón.
Lo que pasa es que el pequeñin no quería ver triste a su mami, Emma, que se había divorciado hace muy poco y luego de sorprenderla con un dulce regalo, un osito de peluche en una tierna bolsita, mientras hacían compras le hizo cerrar los ojos y la llevó hasta un restaurant para tratarla como una reina.
Lee también: El polémico tuit de la Policía española que hizo arder Twitter en San Valetín
El niño llevó un frasco lleno de monedas para poder pagar la cena completa, con entrada, fondo y postre, que le había regalado a su madre, pero al ver el hermoso gesto de amor del niño, la mesera que los atendió quebró en un emotivo llanto y decidió que no les cobraría.
‘Mirar los ojos de la mesera llenarse de lagramas me hizo llorar a mi también. Nos dio nuestra comida gratis como un regalo de PIzza Express de Toquay por realmente la conmovió lo que mi hijo, de sólo 4 años, había hecho por mi. Esto es extremadamente amable y me dejó llorando con felicidad y abrazando a mi hijo con la más pura alegría”, comentó Emma con Daily Mail.
Luego de que Emma contara su historia en Facebook se hizo viral más de 3 mil me gusta y fue compartido cientos de veces, derritiendo corazones en todo el mundo.
La cena fue gentileza del local haciendo de este día muy especial para Max y sobre todo para su mami, que además al finalizar el día recibió otro regalo, pero de un admirador secreto.
