La menstruación es una experiencia que a muchas mujeres no les gustaría vivir todos los meses, sobre todo en esos caso en que viene acompañada de fuertes dolores que, incluso, te puedan dejar tirada en la cama y sin ganas de moverte.

Otro de los puntos claves de este proceso, aunque quizá un tanto superficial, es el sangrado. Una amenaza que las hace estar pendientes todo el tiempo de no sufrir un “accidente” que las deje en evidencia. Por lo mismo, muchas son las que reprograman vacaciones y otros eventos, como una tarde de piscina, por ejemplo, para así evitar cualquier imprevisto desagradable.

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Pero de acuerdo a un artículo publicado en LUN, todos estos “malabares” podrían evitarse gracias a simples técnicas que están a la mano de cualquier mujer. Y es que los mismos anticonceptivos esconden el “secreto” que para muchas podría convertirse en su mejor amigo.

“Antinconcepción de ciclo extendido”, así se conoce la técnica en la que se toman todas las pastillas de corrido, sin el periodo de descanso. De acuerdo a Pamela Oyarzún, ginecóloga de la Clínica Alemana, “una mujer puede decidir no tener regla todo el tiempo que quiera”, asegurando que los anticonceptivos tradicionales son capaces de interrumpir el ciclo menstrual.

Las hormonas de los anticonceptivos reemplazan a las hormonas de los ovarios. Pero cuando se deja de tomar la pastilla, en el periodo de descanso o de placebo, el endometrio se descama, se libera, se bota, como si se hubiera muerto el cuerpo lúteo, pues no hay hormona que sustente al endometrio. Pero si no hay descanso, no se hay sangrado”, confirma la especialista.

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En el mismo contexto, Jorge Sandoval, ginecólogo de la Universidad de Chile, hace memoria e indica que cuando se inventó el primer anticonceptivo, a finales de los 50, se decidió hacerlo imitando el ciclo femenino por razones culturales y religiosas, para que así fuera más aceptado. Por lo mismo, indica que, en rigor, “las mujeres que toman anticonceptivos no tienen menstruación, tienen un sangrado inducido por el anticonceptivo, un sangrado artificial”.

Oyarzún va más allá, y señala que una mujer que toma estas pastillas podría “menstruar” cuando quisiera, pues “el ginecólogo podría dar ciclos de 28, de 30, 35, 50 o 365 días. Da lo mismo”.

Respecto a la pregunta de si acaso hace mal no tener regla, ambos especialistas afirman que no, e incluso derriban el mito de que la menstruación limpia el organismo. “No hay ningún problema en no tener el periodo si te estás cuidando”, comenta Sandoval.

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Pamela agrega que incluso esta técnica podría ser de gran ayuda para aquellas féminas que sufrente de “síndrome premenstrual”, pues “mucha de la sintomatología menstrual o premenstrual tiene que ver con la disminución violenta de los niveles de estrógenos en la sangre”. Cuando se suspende el anticonceptivo, se puede tener hinchazón, dolor, etcétera. Si no la tienes, esta baja, no sangras y no tienes molestias”, aclara.

Por último, indican que tampoco afecta la fertilidad y que con los parches y anillos anticoncepción se puede hacer lo mismo. “Lo clásico incluye tres parches, uno por semana, y a la cuarta se descansa. Para un ciclo extendido basta con tener cuatro parches. Con el anillo es similar. Lo clásico es preparar el anillo por un periodo determinado, pero se puede modificar”, remata Sandoval.