¿Te imaginas terminar con contracciones y sedada en un hospital cada vez que te llega la menstruación? Esto es lo que le ocurre a la joven inglesa, Sophie Loader, quien a sus 23 años ya ha experimentado unos 100 “partos”, de los cuales sólo uno de ellos fue para dar a luz a un bebé real. Como los dolores son tan terribles y se extienden por 72 horas, varias veces ha acabado internada.
La madre de un niño afirma que “he estado en trabajo de parto más de 100 veces, pero sólo una vez fue real”. Las contracciones comenzaron cuando sólo tenía 13 años: “Nunca había sentido un dolor así y no podía entender por qué me ocurría a mí, era aterrador. Incluso el médico creyó que yo estaba embarazada”, relató Sophie al medio inglés Mirror.
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El dolor era tan agonizante que su madre debió llamar a una ambulancia aquella vez. “Era terrorífico y se sentía como si mis órganos fueran despedazados desde adentro”, agregó. Tras meses de exámenes, los médicos encontraron la fuente del problema: Sophie había nacido con dos úteros y uno de ellos se llenaba de sangre en cada menstruación.
Esto engañaba a su cuerpo, el cual lo confundía con un bebé ya listo para nacer. “He estado hospitalizado más de 30 veces porque no podía soportar los síntomas. Cada vez me daban gas y aire para controlar el dolor”, explicó. Finalmente, los médicos le enseñaron a controlarlo con ejercicios de respiración que se suelen usar en el parto.
Tras tener a su hijo de dos años, Chase, los médicos le implantaron un anticonceptivo, por lo que ahora sólo entra en un “parto falso” una vez cada tres meses. Para Sophie “entrar en trabajo de parto una vez al mes por 8 años fue agotador. Pensarías que eso sería suficiente para convencerme de no tener un bebé, pero desde que era una niña pequeña que quería ser madre”, explicó, agregando que es afortunada de tener a su niño.
