Sin retoques de algún programa de edición, ni filtro de Instagram. Estos lugares son hermosos y llenos de vida sin necesidad de Photoshop.
Quienes tienen la posibilidad viajar, sin duda deberían conocer estos mágicos y llamativos paisajes que destacan, según explica el diario español ABC, como los más coloridos de todo el mundo.
En fotografías ya lucen hermosos, pero, ¿se imaginan estar ahí y presenciarlos en primera persona?
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Si eres de los que tiene la fortuna de salir del país cada cierto tiempo, a continuación te decimos dónde quedan estas ‘postales’ para atesorar de por vida.
1.- Isla de Procida: Sus rústicas y coloridas construcciones a orilla del agua, convierten a este lugar en un panorama imperdible si viajas a Italia, en específico al Golfo de Nápoles.
2.- Lago Rosa: No señor, no señora. Nadie vertió pintura rosada, más bien se trata de un alga que produce un pigmento rojo que termina por darle esa notalidad al vital elemento. Si quieres bañarte en sus aguas deberás viajar hasta el país africano de Senegal.
3.- Parque Nacional del Valle de las Flores: El atardecer combina de manera perfecta con este extenso jardín lleno de color y vida gracias a las plantaciones de orquídeas, prímulas, margaritas, azaleas y abedules en un terreno de 90 kilómetros cuadrados. ¿Quieres un ramo de esas hermosas flores? Muy bien, entonces saca boletos para Uttaranchal, al norte de India.
4.- Provenza: Si eres adicto al aroma de la lavanda, y compras todos los productos de limpieza con esa fragancia, entonces estarás en el paraíso si viajas a los campos de lavanda ubicados en la Provenza, al sudeste de Francia.
5.- Colina Shibazakura: En primavera el manto rosáceo que adquiere la vegetación en la inmediaciones del monte Fuji en Japón, es una postal ideal para cambiar tu foto de portada en Facebook. El tono del cielo, más la nieve de la montaña y las plantas rosas, forman un conjunto maravilloso y lleno de color.
6.- Lago Natron: Emplazado en el Gran Valle del Rift en Tanzania, se encuentra esta masa de agua de tonalidad rojiza que produce una explosión de color junto al café de las montañas.
