El pasado sábado, en el programa La Divina Comida de Chilevisión, Matías Vega, Evelyn Matthei, Javiera Acevedo y Pangal Andrade, se reunieron para competir por la mejor cena e impresionar a sus invitados.

En la comida que organizó Vega, realizó una dinámica que simulaba un programa radial en el que un auditor supuestamente enviaba una pregunta a uno de los invitados. Cuando le tocó a Pangal, le consultó por el polémico episodio que Matías vivió en 2013.

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Cabe recordar que en febrero de ese año, el animador de 31 años, se vio involucrado en un complicado incidente que incluso le costó su trabajo en la radio Carolina. Matías fue detenido por la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones con 30 gramos de marihuana.

“Iba al funeral de un amigo. Por cosas de la vida, al final fui solo con un amigo y ese amigo me llamó y me dice que si lo pasaba a buscar a las tres…‘¿Voy a comprar marihuana, quieres que te compre?’. Es como eso. ‘Ya poh, bacán. Sí, obvio. Te paso a buscar en mi auto’, recordó el locutor.

“Lo pasé a buscar. Se sube a mi auto, con su mochila. Avanzo media cuadra y aparecen cuatro autos y se bajan de todas las puertas gente con pistola”, señaló el rubio. Matías recordó que se quedó helado, e incluso pensó que lo iban a secuestrar. “De repente me abren la puerta, ‘¡Policía de Investigaciones!’. Yo me bajo así (con las manos en alto)… Tres, cuatro de la tarde. Niños jugando, familias viendo ‘¡oh, cacha, el de la tele!’”, reveló sobre aquel episodio.

En ese momento, lo separaron de su amigo, a quien se lo llevaron a su casa y a él lo trasladaron al calabozo de la PDI. “Me hicieron desnudarme completo, agacharme para ver si yo había escondido algo. Mucha gente viendo eso, mujeres, hombres de la Policía de Investigaciones”, señaló.

“Luego de eso, me llevan a una oficina donde estaba el fiscal Rosas y me empieza a interrogar sin nadie alrededor, solamente los dos. Me sienta y me empieza a decir ‘¡ya, entrégame a alguien más grande!’. Me comienza a nombrar a gente de la tele, ‘¡tú sabí que este es no se qué!’, yo le decía ‘mira, lo único que te puedo decir es que yo a él le compro un pito y me lo fumo y ya”, contó a sus invitados, el locutor.

Posteriormente a ese episodio, la PDI señaló que Matías era líder de una banda criminal que repartía drogas a cinco comunas de la capital. “Después de eso pasaron ocho meses y dijeron que yo no tenía nada que ver en el tema. Lo único que pudieron ellos como comprobar era que yo iba a comprar marihuana para mi consumo personal”, aclaró.

“Hasta el día de hoy me dicen ‘güena Mati, sácate uno’, o cosas así. Me lo tomo con humor. En ese tiempo igual, cuando me decían, prefiero sacármela que enojarme, porque no saco nada. Pero para mí fue terrible”, recordó Matías, esta vez como una anécdota en su vida.